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| Informe Lugano
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| por Manu Rodríguez
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Susan George se vale de un subterfugio, un presunto informe encargado a un supuesto grupo heterogéneo de profesionales, para referir las maldades intrínsecas del sistema capitalista y la forma en la que hipoteca el futuro del planeta. El libro está escrito con un estilo provocador que invita al lector a reflexionar y a considerar muchos aspectos de la sociedad en la que vivimos.
La autora habla así del crecimiento descontrolado de la producción de bienes, los costes ambientales crecientes o el ensanchamiento de la falla entre ricos y pobres como factores principales de una carrera hacia el desastre. El capitalismo se alimenta del crecimiento constante, y es evidente que la espiral tendrá que toparse en un momento u otro con límites físicos, ecológicos y demográficos. Tiene también un hueco para hablar de las instituciones internacionales que se han creado para proteger e imponer esta deriva liberalizadora a lo largo y ancho de todo el mundo.
Frente a este crecimiento descontrolado protagonizado por las multinacionales, George exige la progresiva atemperación de la gran distancia que separa al puñado de ricos de la inmensa mayoría de pobres, la asunción de políticas medioambientales serias y la reestructuración de industrias como la automovilística o la de armamento.
En cualquier caso, “El Informe Lugano” se ha convertido desde su publicación en uno de los manuales imprescindibles para comprender el sistema que rige en el mundo y criticarlo de forma constructiva.
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